En virtud del GDPR, que entró en mayo último, los particulares tienen ahora mayores derechos en lo que respecta a su capacidad para solicitar y acceder a los datos personales de las entidades que posean dichos datos sobre ellos. La reciente legislatura del estado de California, aprobó la Ley de Privacidad del Consumidor de California de 2018 (Proyecto de Ley AB375), que otorga a los ciudadanos californianos, derechos de datos similares a los del GDPR.
Las solicitudes de acceso a los datos podrían generar cuantiosos gastos operativos para las entidades que ya se enfrentan a multas sin precedentes en caso de una violación de la seguridad.
Las organizaciones que controlan o procesan los datos personales de los ciudadanos de la UE están, ahora, obligadas a proporcionar toda la información sobre un cliente o empleado que la solicite. En 2020, lo mismo se aplicará a las empresas estadounidenses que trabajarán con AB375.