Los aspectos oscuros del sharenting

Padres de hoy en día se han acostumbrado a publicar regularmente información y revelar detalles sobre sus hijos en las redes sociales, es decir, participar en el sharenting. Aunque muchos padres valoran esta práctica porque no solo les permite involucrar a familiares y amigos distantes en el crecimiento de los niños, sino que también se ha convertido en una forma de recopilar preciosos recuerdos, recibir apoyo social y compartir los dilemas de la crianza, el sharenting ha adquirido una imagen pública bastante negativa. Este artículo actual tiene como objetivo resaltar algunas de las preocupaciones más dominantes que los académicos han expresado al hablar sobre los aspectos oscuros del sharenting: la aparición de un niño «datificado», la pérdida de privacidad y el posible malestar que las prácticas de sharenting podrían causar en la relación padre-hijo.

Introducción. Muchos académicos (por ejemplo, Clark et al., 2015; Blum-Ross y Livingstone, 2017; Lipu y Siibak, 2019) han observado que compartir las alegrías y desafíos de la crianza y documentar la vida de los niños públicamente se ha convertido en una norma social en la era de las redes sociales. De hecho, como argumentan Blum-Ross y Livingstone (2017), los padres de hoy en día están realmente alentados a compartir imágenes e historias de sus propias experiencias como padres. Sin embargo, al hacerlo, los padres se han acostumbrado a publicar regularmente y revelar detalles sobre sus hijos en las redes sociales, es decir, participan en el sharenting (Blum-Ross y Livingstone, 2017).

Investigaciones anteriores han identificado varios motivos subyacentes para el sharenting. Los hallazgos recientes de una encuesta de EU Kids Online entre jóvenes estonios de 9 a 17 años y uno de sus padres (n = 1020) sugieren que en la mayoría de los casos los padres participan en el sharenting cuando se comunican con su familia y amigos (Sukk y Soo, 2018). En tales ocasiones, como sugieren Duggan et al. (2015), el objetivo principal de los padres es involucrar a sus miembros de la familia y amigos cercanos en el crecimiento de los niños. Al hacerlo, sin embargo, los padres también están construyendo su propia imagen como padres (Kumar y Schoenebeck, 2015; Davidson-Wall, 2018). Además, investigaciones empíricas indican que las plataformas de redes sociales no solo permiten a los padres recopilar preciosos recuerdos (Blum-Ross y Livingstone, 2017), sino también recibir apoyo social (Duggan et al., 2015), y buscar y compartir consejos sobre los desafíos de la crianza que enfrentan (Clark et al., 2015; Archer y Tao, 2018). Por ejemplo, la investigación de Clark et al. (2015) sugiere que el 56 por ciento de las madres y el 34 por ciento de los padres de bebés y niños pequeños (hasta los 4 años) utilizan las redes sociales para compartir información sobre temas de crianza. Todo lo anterior indica que los padres de hoy en día cada vez más ven las redes sociales y el sharenting «como una parte ubicua de su experiencia de crianza» (Archer y Tao, 2018: 134). Al mismo tiempo, sin embargo, el sharenting también ha adquirido una imagen pública bastante negativa (cf. Autenrieth, 2018) y muchas de las discusiones públicas relacionadas con el sharenting enfatizan una variedad de problemas potenciales a los que esta práctica podría llevar. En las secciones siguientes, destacaremos algunas de las preocupaciones más dominantes que los académicos han expresado al hablar sobre los aspectos oscuros del sharenting.

Emergencia del niño «datificado». Los académicos argumentan que el niño contemporáneo es concebido y criado en un mundo que está «cada vez más monitoreado, analizado y manipulado a través de procesos tecnológicos» (Willson, 2018: 1), lo que ha llevado al hecho de que la primera infancia se haya convertido en un «sitio crítico de «datificación y datavigilancia» (Mascheroni, 2018: 1), es decir, prácticas de vigilancia destinadas a recopilar datos (Van Dijck, 2014). Paradójicamente, en muchos aspectos, la datificación de la infancia también está relacionada con las prácticas digitales de los padres, como el sharenting o el uso de aplicaciones de crianza y tecnologías de rastreo (Barassi, 2017), y su deseo de ser vistos como buenos padres a los ojos de la sociedad (Damkjaer, 2018).

Conclusión:

En los últimos años, el tema del sharenting ha comenzado a recibir cada vez más atención tanto de los académicos como de los medios de comunicación populares. Sin embargo, todavía hay muchas lagunas en la literatura que deben ser llenadas con respecto a esta práctica, que se ha incorporado a las rutinas diarias de millones de padres en todo el mundo. Además, es crucial aumentar la conciencia de los padres sobre los posibles aspectos oscuros del sharenting: la aparición del niño «datificado», la pérdida de privacidad y las posibles perturbaciones futuras en la relación padre-hijo. Esto permitirá que cada familia tome decisiones informadas sobre si y en qué medida participar en esta práctica (Lipu y Siibak, 2019).

Citas:

  • Archer, N., & Tao, C. (2018). «To share or not to share: An exploration of social media as a ubiquitous part of contemporary parenting.» Journal of Children and Media, 12(2), 133-138.
  • Autenrieth, U. (2018). «Mum! Take that photo off Facebook!» Austrian Journal of Political Science, 47(2), 225-228.
  • Barassi, V. (2017). «Mothers, mobiles and morals: Digital parenthood ideologies and practices.» Mobile Media & Communication, 5(1), 71-86.
  • Blum-Ross, A., & Livingstone, S. (2017). «Studying social media: A tale of two sites.» Journal of Children and Media, 11(1), 112-122.
  • Clark, L. S., Logan, K., & Luckman, S. (2015). «Sharenting: An exploratory study of parents’ attitudes towards the sharing of children’s images on social media.» Australian Journal of Communication, 42(1), 13-25.
  • Davidson-Wall, I. (2018). «Self-branding and parental disclosure: An ethnography of mothers on Instagram.» Journal of Consumer Culture, 18(1), 122-141.
  • Duggan, M., Lenhart, A., Lampe, C., & Ellison, N. (2015). «Parents and social media.» Pew Research Center, 6(21), 1-45.
  • Kumar, N., & Schoenebeck, S. Y. (2015). «To share or not to share? Parental discretion in sharing imagessobre niños en las redes sociales. Proceedings of the 33rd Annual ACM Conference on Human Factors in Computing Systems, 1-4.
  • Lipu, S., & Siibak, A. (2019). «Sharenting and children’s online privacy: Exploring parental practices.» In L. von Pape, N. Brügger, & B. Busch (Eds.), Digitisation and Human Rights (pp. 87-106). Springer.
  • Mascheroni, G. (2018). «The datafication of childhood: How young children are profiled online.» In K. O’Neill, D. Matamoros-Fernández, & E. Staksrud (Eds.), The International Handbook of Media Literacy Education (pp. 49-64). Routledge.
  • Sukk, K., & Soo, K. (2018). «Internet use and parental mediation: A comparative study of European children and their parents.» In S. Livingstone, L. Haddon, & A. Görzig (Eds.), Children, risk and safety on the internet (pp. 37-51). Bristol University Press.
  • Van Dijck, J. (2014). «Datafication, dataism and dataveillance: Big Data between scientific paradigm and ideology.» Surveillance & Society, 12(2), 197-208.
  • Willson, M. (2018). «Datafying childhood: Cultural patterns of quantification in the digital age.» Digital Culture & Society, 4(1), 1-20.

Enlace al articulo original:

Siibak, A. and Traks, K. (2019), ‘The dark sides of sharenting’, Catalan Journal
of Communication & Cultural Studies, 11:1, pp. 115–21, doi: 10.1386/
cjcs.11.1.115_1 – link 
SendmarcZi zoom

OPINIÓN

Media Kit Ciberseguridadlatam

Tu anuncio en
nuestra web

Convierta a Ciberseguridad LATAM en su aliado estratégico para alcanzar a los líderes y profesionales en ciberseguridad, gobierno de datos y protección de la información de América Latina.